El senador estatal Frank Artiles renunció el viernes en la mañana tras el escándalo causado por los insultos racistas que profirió en una conversación privada con un par de colegas afroamericanos a principios de esta semana.
En la misma conversación, el republicano de Miami llamó a una senadora una “perra” y una “niña”, dijeron los dos senadores.
Mientras tomaban unos tragos después de las 10 p.m. en el Governors Club, sólo para miembros, a pocos pasos del Capitolio estatal, Artiles dijo a los senadores Audrey Gibson de Jacksonville y Perry Thurston de Fort Lauderdale que el presidente del Senado Joe Negron había llegado al liderazgo republicano porque seis “niggers” en la membresía republicana lo habían elegido.